Es Tiempo de Conectar, noviembre 28

“¡Pues el Señor concede sabiduría! De su boca provienen el saber y el entendimiento.” Prov. 2:6.

Todos estamos rodeados de ocupaciones y afanes, y recuerdo las palabras de Jesús en Mateo 6:34,

“»Así que no se preocupen por el mañana, porque el día de mañana traerá sus propias preocupaciones. Los problemas del día de hoy son suficientes por hoy.”

Nos pasamos la vida apagando fuegos o calmando tormentas, muchas de ellas producidas por nosotros mismos como resultado de nuestra codicia, necedad o falta de seguir la dirección de Dios. Sin embargo Jesús tiene razón cuando dice que cada día llega con su propia preocupación.

Hay días en los que tenemos todo planeado, sabemos muy bien la tarea a emprender, la meta a lograr pero se derrumba todo cuando un hijo se enferma o cuando llega una crisis con la que no contabas, sin embargo así es la vida.

Pero Salomón nos da una clave al decir que de el Señor proviene la sabiduría y que de Él proviene el saber y el entendimiento.

Somos ingenuos si pensamos que nos podemos saltar el tiempo que pasamos con Dios a diario pues es crucial que desarrolles en tu vida el hábito de la oración diaria, de leer la Biblia todos los días. Desde los tiempos de pandemia en el año 2020 sigo el plan devocional llamado La Biblia en un Año escrito por Nicki Gumbel donde mi afán no es leer la Biblia en un año pero sí escuchar a Dios todos los días por medio de las Escrituras.

No es importante llevar la cuenta de cuántas veces has leído toda la Biblia, lo importante es desarrollar el hábito y escuchar a Dios todos los días.

Salomón nos da el secreto para llevar una vida con propósito, una vida que no se la pasa siendo reactiva sino que es proactiva, que sueña grandes sueños y cree que todo se puede en Cristo que nos dirige y nos fortalece.
Muchas veces terminamos siendo como el pueblo de Israel cuando pasaba el desierto del Sinaí y no tenía ni idea de dónde iba a sacar el agua ni qué camino coger, pero Dios sí.
Tu vida, mi vida, la existencia humana tiene propósito así que levanta tus ojos y créelo.
Lo más común en la vida son los obstáculos que encontramos en el camino y saber que el mundo que nos rodea es muy cruel en sus juicios.
Hemos aprendido que si no eres de tal familia, con tal apellido, que si no fuiste a la universidad, que si no te casaste con la persona correcta, que si eres de piel morena por no decir que eres de raza negra, etc. que no vas a poder y que tu destino es ser un obrero de segunda clase.
¡Nada más falso! Una de las cosas que nos distingue en toda la creación, por encima de la Inteligencia Artificial, es que podemos soñar.
Si estás a punto de emprender un sueño o un proyecto,
Ora a Dios
Consigue la información pertinente.
Ora que Dios te dé un mentor, una persona a quien admiras.

La idea es que hagas acciones diarias que te lleven al cumplimiento de tu sueño, pasos así sean pequeños que te lleven adelante.

Tienes que enfocarte en hacer las cosas que te ayudan a construir tu sueño y hacer esas cosas bien.
Leer buena literatura es muy importante y ahora con el recurso del internet es más fácil que nunca.
Henrí es un jóven campesino que soñaba con ser un buen peluquero, fue a YouTube y obtuvo gratis buena instrucción, como no tenía el dinero para comprar una buena máquina de cortar el cabello, solicitó a uno de los dueños de una finca y éste le ayudó.
Toda persona que tiene un gran sueño en esta vida debe estar listo para enfrentar la adversidad.
Toda conquista demanda una batalla.
Detrás de todo reto hay un gigante.
La buena noticia es que, si el sueño es de Dios, la batalla le pertenece a Él

Nunca ignore los problemas, porque los problemas no te van a ignorar a ti. Prepárate para tener problemas, prepárate para enfrentarlos, prepárate para vencerlos que Dios estará contigo y te ayudará a desarrollar tu potencial.
La razón por la que muchas veces no se atreven a desarrollar su potencial es porque no están dispuestos a confrontar sus propios temores.
El temor no es sinónimo de debilidad, pues todos luchamos con el temor. Por eso, valiente no es el hombre o la mujer que no tiene temores, sino el que a pesar de sus temores no se detiene sino que sigue avanzando.
Te comportas como un valiente el día que decides que vas a enfrentar tus temores y que a pesar de ellos vas a lograr tus sueños y tus metas.
Debemos entender que todo sueño tiene un factor riesgo, y si queremos vivir al máximo debemos asumir riesgos para recibir lo que Dios tiene para nosotros.
Haz todo para la Gloria de Dios y recuerda lo que dice Proverbios 16:3, “Pon todo lo que hagas en manos del Señor, y tus planes tendrán éxito.”
A todos nos llega el momento cuando nos toca dejar de soñar, dejar de hablar y nos toca empezar a actuar. Lo que pongas en las manos de Dios, Él se encargará de cumplirlo.
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Te animo a que hagas uno de nuestros cursos en www.conectarglobal.org. Dios te bendiga