El presidente John F. Kennedy, cuando ganó la candidatura por su país dijo: «Nos encontramos hoy al borde de una nueva frontera… pero la nueva frontera de la que hablo no es un conjunto de promesas, sino un conjunto de desafíos. Resume no lo que pretendo ofrecer al pueblo estadounidense, sino lo que pretendo pedirle».

Te animo a que leas todo el capítulo de Hechos 25 que describe cómo el Apostol Pablo pasó años de cárcel falsamente acusado por sus enemigos.

La vida está llena de desafíos, problemas y dificultades. A veces pensamos que si tan solo pudiéramos afrontar el desafío inmediato que enfrentamos, todos nuestros problemas se acabarían. Pero la vida no es así. Si resolvemos un problema, otros están a la vuelta de la esquina.

El asunto es no permitir que los desafíos nos impidan llevar a cabo el servicio que Dios nos ha encomendado. Enfrentar problemas no es parte de la vida, sino que son la vida misma.

Job 5:7 dice que “Pero como las chispas se levantan para volar por el aire, así el hombre nace para la aflicción.”
Juan 16:33, “En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”

En la Biblia encontramos que el salmista enfrentó dolor y angustia. En Hechos 25, Pablo enfrentó falsas acusaciones y la frustración de estar en prisión por estas falsedades.

Los grandes desafíos de nuestro mundo son la trata de personas, el racismo, la justicia politizada, el cambio climático, la hambruna, guerras y terrorismo. Seguimos en un mundo que a lo malo llaman bueno y a lo bueno lo llaman malo.

En realidad los desafíos, problemas y dificultades que enfrento son relativamente menores y no son nada comparados con lo que otros han enfrentado en el pasado y aún enfrentan en todo el mundo.

Lucas registra el juicio de Pablo de una manera muy objetiva y sin emociones. Este debió haber sido un momento extraordinariamente frustrante para Pablo. Este gran líder de la iglesia, está encerrado, aparentemente incapaz de hacer lo que está llamado a hacer. Está bajo custodia, soportando las limitaciones físicas y la incomodidad de la cárcel.

Se presentan graves cargos contra Pablo (vv. 1-7). Se defiende señalando que no ha hecho nada malo (vv. 8,10). Pero Festo estaba más interesado en lo que la gente pensaba (v. 9) que en lo que era correcto.

La resurrección de Jesús siempre debe estar en el centro del mensaje que proclamamos. La única acusación válida era que Pablo predicaba que Jesús estaba vivo, pero se habían presentado contra él numerosas acusaciones falsas.
Debió ser muy difícil para Pablo enfrentar todas estas dificultades y frustraciones, sin embargo, como siempre, Dios obra para bien.

Como el mismo Pablo escribió en Romanos 8:28: “Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos.” Romanos 8:28.

A lo largo de estos 2000 años desde que Pablo experimentó estos desafíos, millones de personas han leído la historia de Pablo y se han sentido alentadas al saber que él también enfrentó encarcelamiento injusto, acusaciones y críticas.

Al enfrentar con fidelidad tantos desafíos, estoy seguro que Pablo se habría asombrado al saber cuánto bien iba a resultar de sus tribulaciones. Quizás nunca vamos a saber cómo Dios va a usar nuestra fidelidad ante los desafíos que hemos enfrentado.

Oración
Señor, gracias porque estás con nosotros cuando enfrentamos acusaciones y críticas. Gracias porque, a través de todas estas frustraciones de la vida, colaboras para el bien de quienes te aman y son llamados conforme a tu propósito (Romanos 8:28).

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Creado y narrado por Juan Bravo. producido por Conectar Global