Devocional diario marzo 10
Josías y el ADN de Dios
2 Crónicas 34:1-2 y 31
” De ocho años era Josías cuando comenzó a reinar, y treinta y un años reinó en Jerusalén. Éste hizo lo recto ante los ojos de Jehová, y anduvo en los caminos de David su padre, sin apartarse a la derecha ni a la izquierda. Y estando el rey en pie en su sitio, hizo delante de Jehová pacto de caminar en pos de Jehová y de guardar sus mandamientos, sus testimonios y sus estatutos, con todo su corazón y con
toda su alma, poniendo por obra las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro”
Josías comenzó a reinar a los 8 años, siendo tan solo un niño. ¿Por qué fue ungido?
Su Padre fue el rey Amón, reinó 2 años e hizo lo malo delante de Dios (nunca se humilló, aumentó el pecado, sus mismos siervos lo asesinaron). Su abuelo fue el rey Manases quien reinó por 55 años y era perverso (copió abominaciones de los paganos, ofreció sacrificio a los ídolos, entre otras cosas horrendas).
En el ADN familiar de Josías corría sangre llena de maldad pero Él no siguió esos hábitos de su familia, a pesar de estar en sus genes.
Josías decidió seguir el ADN celestial ¿por qué? Tenía un libro en su mano, y ese mismo libro es la Biblia que tú y yo tenemos el día de HOY.
No importa dónde naciste ni quién fue tu familia, tampoco importa si tuviste buenas oportunidades o no, nada de eso es pretexto cuando Dios quiere usarte. Dios tiene fe en ti, Él te escogió.
Lo que Josías pudo leer en ese libro transformó su vida al punto de no desviarse ni a derecha ni a izquierda.
La Biblia contiene instrucciones para nuestra vida, nos da ejemplo de vida, nos ayuda a crecer espiritualmente, a seguir a Dios sin desviarnos y Josías decidió caminar en los caminos de David “su padre” pero David no era su padre sino tan solo un antepasado y… Un niño de 8 años pudo decidir que no iba a ser como padre ni como su abuelo, sino que iba a ser como lo que había leído en la Biblia.
Quizá algunos se preocupan por sus modelos: «Mi familia no es la mejor, yo soy el único cristiano. Todos han muerto de una enfermedad». ¡No tiene que ser así contigo! Cuando te sientas solo, el libro transformador te dice: «Yo estoy contigo todos los días». Si fallaste, Él te dice: «Yo borro tus pecados y te hago libre».
¡No digas que no tienes dónde aprender! Tú tienes corriendo por tus venas el ADN de Dios. No importa quiénes son tus maestros, quiénes te enseñaron. Deja de quejarte y contar tus tragedias, comienza a contar tus bendiciones.
Un sabio se paró frente al público, contó un chiste y todos se rieron. Al cabo de una hora volvió a contar el mismo chiste y casi nadie se reía, contó el chiste una y otra vez hasta que nadie se rió…. Y dijo si no puedes reírte varias veces de una sola cosa, ¿por qué lloras por lo mismo una y otra vez?
Toma lo bueno de tu familia, perdona sus fallas, desecha lo que es malo y no llores por lo que te hace daño, ¡decide ser diferente porque eres cristiano! Escoge lo mejor de tu linaje y vive para Dios tal como lo hizo Josías. La vida de Josías me deja un gran mensaje: “Tú puedes triunfar sino te apartas de Dios y caminas con Él todos los días».
¿Qué hizo Josías? Para cambiar su ADN al ADN de Dios.
2 Reyes 23:24-25
“Josías también se deshizo de los médiums y los videntes, de los dioses familiares, de los ídolos, y de todas las demás prácticas detestables, tanto en Jerusalén como por toda la tierra de Judá. Lo hizo en obediencia a las leyes escritas en el rollo que el sacerdote Hilcías había encontrado en el templo del Señor. Nunca antes hubo un rey como Josías, que se volviera al Señor con todo su corazón, con toda su alma y con todas sus fuerzas, obedeciendo todas las leyes de Moisés. Desde entonces nunca más hubo un rey como él.”
Haz un Pacto de caminar todos los días con Dios.
Tenemos la naturaleza de Adán, la que se inclina al pecado pero también tienes la naturaleza divina de Dios que se inclina a la justicia. Cuando te acercas a Dios, Él se acerca a ti. Dios quiere guiarte por el camino y que desarrolles una amistad con Él.
Amos 3:3
«¿Andarán dos juntos que no estuvieren de acuerdo? Si nosotros queremos que el Espíritu Santo
camine con nosotros, nuestro estilo de vida debe agradarle»
Gálatas 5:16
«Andad en el espíritu» para tener amistad con el Espíritu Santo debemos andar en ÉL,
dependiendo a diario, y consultándole todos los detalles de nuestra vida».
Amistad es entrega… Dios no quiere una parte de tu tiempo, quiere todo de ti. No quiere compartirte con
tu trabajo, no quiere que adores algo más que solamente a Él. Si quieres ser su amigo deberás estar de
acuerdo con lo que te dice y dejarte llevar por Su dirección.
¿Cuándo nos daremos cuenta que somos amigos de Dios? Cuando en vez de correr al teléfono a contarle a
alguien nuestros problemas, corramos a Su presencia a encontrar Su dirección y Su consejo. Él te está
esperando “en el mismo lugar” para reunirse contigo.
Guarda sus mandamientos y estatutos con todo el corazón. La Biblia no es cualquier libro, es la Palabra de
Dios y cada vez que la leemos adoptamos la genética de Dios. Adopta el ADN de los buenos ejemplos, de
los héroes de la fe. Sé imitador de aquellos que por la fe y la paciencia “alcanzaron las promesas”.
Guarda SU palabra en tu corazón. Recuerda lo que dice el Salmo 119… “En mi corazón he guardado tus
dichos para no pecar contra ti”. Eso te ayudará a ser recto, a ser santo.
Pon por obra las palabras del Libro.
Salmo 51
Dice “… en maldad he sido formado y en pecado me formó mi madre” Pero “Crea en mí, oh Dios, un
corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí”.
Existe una generación que no se conforma a seguir el modelo malo de sus antepasados sino que está
dispuesto a cambiar el rumbo de su historia, como en la película ‘Corazón de Caballero’… Tú puedes
cambiar tu estrella. El camino no está hecho sino que se hace al andar.
Decide caminar por el camino que caminó Josías y tu ADN cambiará y marcará pauta para los que vienen
detrás de ti.
Oración: «A pesar de no tener buenos modelos, hoy decido que tu ADN, Dios, corra por mis venas.
Queremos vivir cerca de tu Palabra y ser transformados solo por ti. Cambia nuestra estrella y ayúdanos a
no torcernos ni a derecha ni a izquierda».
Joel 2:26-29
“Ustedes comerán hasta saciarse, y alabarán mi nombre, pues yo, el Señor su Dios, haré maravillas entre ustedes. Y nunca más mi pueblo será avergonzado. Entonces sabrán ustedes que yo estoy en medio de Israel, y que yo soy el Señor su Dios, y nadie más. Y mi pueblo nunca más será avergonzado. Después de esto, derramaré mi espíritu sobre la humanidad entera, y los hijos y las hijas de ustedes profetizarán; los ancianos tendrán sueños, y los jóvenes recibirán visiones. En aquellos días, también sobre los siervos y las siervas derramaré mi espíritu. Y haré prodigios en el cielo y en la tierra, con sangre y fuego y columnas de humo”
Tú comerás hasta saciarte… Esto es abundancia. Alabarás a Dios porque hará maravillas en tu vida. Lo que te avergonzaba nunca más volverá a causarte dolor. El versículo 28 comienza con un «DESPUÉS derramaré de mi Espíritu sobre la humanidad entera». ¿Qué nos quiere decir esto?
El Espíritu Santo es PARA TODOS: para tu familia, para tus amigos… En el cielo hay espacio para cada uno de ellos. Comparte de tu amor por Él y deja que Él convenza a tu familia de pecado, de justicia y de juicio.
Recuerda que ni tú ni yo somos el Espíritu Santo de nadie, dejemos que el mismo Espíritu de Dios haga su obra en ellos… ni tú ni yo podremos cambiarlos, ¡sólo Dios!
De dónde se vayan, te aseguro que Dios los traerá con su Espíritu Santo porque Él está en todo lugar. No podemos huir de su presencia…