Devocional diario marzo 18
Buscadores de Dios
Deuteronomio 4:29
“Sin embargo, desde allí, buscarán nuevamente al Señor su Dios. Y si lo buscan con todo el corazón y con toda el alma, lo encontrarán”.
Jeremías 29:12-13
«En esos días, cuando oren, los escucharé. Si me buscan de todo corazón, podrán encontrarme».
Debemos volvernos «Buscadores de Dios» porque solo si le buscamos de todo corazón podremos encontrarnos con Él. El que busca, encuentra. El que llama a la puerta, se le abre. Cristóbal Colon descubrió América mientras estaba buscando una ruta para llegar a la India.
¿Qué grandes sorpresas descubrirás tú cuando te decidas a buscar a Dios? Él no se conforma con un poco de ti ni con las sobras de tu tiempo… Él te quiere todo.
Cuando buscas a Dios te conviertes en un imán que atrae la presencia de Dios. Es en su presencia donde nos sentimos plenos porque fuimos creados para tener intimidad con Dios. Cuando buscamos a Dios nos hacemos dependientes de Él. Aprendamos a buscarlo y encontrarlo en cada situación…
Muchas veces solo decimos «por qué a mí» pero no «para qué Dios»… «¿Para que permites que las cosas sucedan?» Es Dios mismo diciendo: «Quiero que te vuelvas a mí en oración y de todo corazón».
Dejemos de buscar el consejos en psiquiatras, las respuestas solo las encontramos en la presencia de Dios. El ser buscador de Dios te asegura su protección.
2 Samuel 22:31
“El camino de Dios es perfecto. Todas las promesas del Señor demuestran ser verdaderas. Él es escudo para todos los que buscan su protección”
Qué mejor escudo que tu Dios Todopoderoso. Su camino es perfecto, sus promesas son verdaderas entonces confía en su protección y si vas a buscar ayuda de alguien, tiene que ser de Dios.
2 Samuel 22:42
“Buscaron ayuda, pero nadie fue a rescatarlos. Hasta clamaron al Señor, pero él se negó a responder”.
Nada ni nadie te puede saciar más que Dios, busca su ayuda y no la de la gente. Busca agradar a Dios antes que a las personas. ¿Cuánto más demorarás en darte cuenta? Él único que te rescata es Dios.
Isaías 30:1
«Ay, de los hijos que se apartan, dice Jehová, para tomar consejo, y no de mí; para cobijarse con cubierta, y no de mi espíritu, añadiendo pecado a pecado»
Por muchos años buscábamos en la fuente incorrecta, cuando tenemos que volvernos al consejo del Espíritu Santo y buscarlo con desesperación. Tu única cobertura tiene que ser Él. Nada bueno les espera a aquellos que rechazan la presencia de Dios pero muchas bendiciones vienen a aquellos que se convierten en «Buscadores de Su presencia».
2 Crónicas 7:14
“Pero si mi pueblo, que lleva mi nombre, se humilla y ora, busca mi rostro y se aparta de su conducta perversa, yo oiré desde el cielo, perdonaré sus pecados y restauraré su tierra” .
Dios se agrada en gente que es buscadora de Su presencia, de aquellos que dicen «no importa que me rechacen por mi devoción a Dios, seguiré buscándole con más intensidad».
Puede que hayas dejado de buscarlo porque te faltó perseverancia, te acomodaste simplemente a lo que leías de un libro, a las experiencias de otras personas pero hoy Dios mismo te está diciendo: «Vuélvete un BUSCADOR de mi PRESENCIA».
2 Samuel 6:10-12
«De modo que David no quiso traer para sí el arca de Jehová a la ciudad de David; y la hizo llevar David a casa de Obed-edom geteo. Y estuvo el arca de Jehová en casa de Obed-edom geteo tres meses; y bendijo Jehová a Obed-edom y a toda su casa. Fue dado aviso al rey David, diciendo: Jehová ha bendecido la casa de Obed-edom y todo lo que tiene, a causa del arca de Dios. Entonces David fue, y llevó con alegría el arca de Dios de casa de Obed-edom a la ciudad de David».
Al principio David no quiso el Arca (que tipifica la presencia de Dios) pero vio cómo Dios bendijo a Obed-Edom (existe una diferencia en una familia que es buscadora de Dios) y decidió traerla. Vendrán días donde la gente se te acerque y te pregunte: «¿Cómo fue que Dios bendijo a tu familia?» y vas a responder: «A causa del Arca de Dios».
Cada día debes abrir tu corazón para que sea Su presencia en ti, para que en ti sea Su habitación.
A David:
Su Padre no lo consideraba.
Sus hermanos no lo querían.
Su rey quería matarlo pero el día que el trajo el Arca… TODO CAMBIO.
Muchas circunstancias van a cambiar en tu vida cuando te vuelvas un buscador de la presencia del Espíritu Santo.
David dijo en el Salmo 51:8-10 «Hazme oír gozo y alegría, Y se recrearán los huesos que has abatido. Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí. No me eches de delante de ti, Y no quites de mí tu santo Espíritu. Vuélveme el gozo de tu salvación. Y espíritu noble me sustente».
Se pierde el gozo cuando dejamos de buscar a Dios. Por eso, David aprendió y decía que podía quitarle todo pero no su “Santo Espíritu”. David sentía que sus huesos se secaban por la ausencia del Espíritu Santo, ya había visto «todo lo que sucede» cuando uno reina sin el Espíritu Santo… Una catástrofe!!!
Cuando eres un buscador de Dios, su necesidad se vuelve tu necesidad.
2 Crónicas 15:12
“Luego hicieron un pacto de buscar al Señor, Dios de sus antepasados, con todo el corazón y con toda el alma”.
Dios pacta con los que le buscan como lo hizo con Moisés. Él hizo un tabernáculo de reunión y Dios pactó con Él. No tienes ni idea todo lo que hace la presencia de Dios, cuando eres un buscador de Él y logras cautivar Su corazón.
Salmos 9:10
“Los que conocen tu nombre confían en ti, porque tú, oh Señor, no abandonas a los que te buscan”.
Vive cada día buscando lo que Dios ha preparado especialmente para ti. ¿Hasta cuando tienes que buscarlo? Hasta que lo recuperes. Vuélvete a Él con TODO el corazón. Pregúntale sobre todos tus asuntos.
Proverbios 3:6
“Busca su voluntad en todo lo que hagas, y él te mostrará cuál camino tomar” Búscalo incansablemente hasta que Él cautive tu corazón y lo hallarás.