Es Tiempo de Conectar, octubre 31

En el árbol genealógico de Jesús hay héroes de la fe, grandes personajes que Dios usó en su momento para cumplir sus propósitos como también hay otros que no vale la pena imitar, sin embargo Dios usó estos sucesos y a estas personas para servir como conductos hacia el Mesías.

Por ejemplo, en la genealogía de Jesús en el Evangelio de San Mateo, se mencionan algunos personajes que no fueron honestos, que cometieron crímenes, que fueron mentirosos así como personas honestas, hombres y mujeres de fe.

Cuando Dios te llama y tiene un plan con tu vida, no hay error o fracaso que impida cumplir sus propósitos.

Este devocional es escuchado por personas de habla hispana que viven en muchos países, y aunque no conozco a la gran mayoría, oro por ustedes todos los días, oro que Jesús se revele a sus vidas y que encuentren refugio en Dios en un mundo hostil y duro.

Esta Escritura ha hablado a mi vida cuando he tenido mis propios desvíos que todos experimentamos de vez en cuando.

“Porque irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios.” Rom. 11:29.

Has aterrizado en este devocional diario porque Dios es el que ha puesto en tí sed y hambre espiritual y no hay nada que pueda estorbar este llamado.

Jacob engañó a su hermano Esaú, o el Rey David adulteró con una vecina y después de darse cuenta que la había embarazado, trató de engañar y le quitó la vida a su esposo.

También a Judá, uno de los doce patriarcas que tuvo un hijo con Tamar, una prostituta o Rahab otra prostituta cananea y extranjera que es parte de la genealogía de Jesús..

¿Qué aprendemos de esto? Por un lado que Dios escribe derecho sobre renglones torcidos y que a pesar de la fragilidad y debilidad humana, el plan de Dios se cumple y Su Reino avanza y no se detiene.

Dice Pablo en Romanos 3:9-12,
“¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? ¡De ninguna manera!, pues hemos demostrado que todos, tanto judíos como gentiles, están bajo el pecado. Como está escrito:
«No hay justo, ni aun uno; no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios. Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; no hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno.”

Si esta clase de personas fueron parte del linaje apuntando al Mesías, a Cristo Jesús, ¿qué sigue después de Cristo?

Rom 5: 15-19, Pablo nos habla del contraste entre Adán y Cristo y quiero que escuches o leas bien, pon atención.

“Pero el don no fue como la transgresión, porque si por la transgresión de aquel uno muchos murieron, la gracia y el don de Dios abundaron para muchos por la gracia de un solo hombre, Jesucristo.
Si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia.
Así que, como por la transgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación que produce vida.
Así como por la desobediencia de un hombre muchos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno, muchos serán constituidos justos.”

Desde la resurrección de Jesús vivimos la edad de la gracia, seguimos siendo parte de una naturaleza corrupta, nadie hay bueno pero Cristo llevó en la Cruz a ese ser caído, clavó esa simiente pecadora para darnos una nueva herencia.

En la resurrección se abrió una gran puerta para la humanidad entera, para gente de toda raza, lengua, pueblo o nación, la puerta del perdón, de la transformación por medio de la Sangre de Jesús.

El teólogo católico estadounidense Raymond Brown dice: «El Dios que escribió los comienzos con renglones torcidos también escribe la secuencia con renglones torcidos, y algunos de esos renglones son nuestras propias vidas y nuestro testimonio.

Un Dios que no dudó en utilizar tanto a los intrigantes como a los nobles, tanto a los impuros como a los puros, tanto a los hombres que el mundo admiraba como a las mujeres que el mundo desaprobaba, ese Dios sigue actuando a través de la misma mezcla.”

“Considerad, pues, hermanos, vuestra vocación y ved que no hay muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia.” 1 Cor. 1:26-29.

La Iglesia es un hospital a donde van los enfermos para ser sanados.

Jesús dijo en Lucas 5:31-32, “Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento.”

Jesús sigue escribiendo Su historia por medio de gente impura, imperfecta, por pecadores, por intrigantes y calculadores, por orgullosos, por deshonestos para que por medio de Cristo seamos transformados en personas puras, talentosas, que hacemos lo bueno, humildes y honestas.

“Nadie es tan malo, tan insignificante, tan falto de talento o tan fuera del círculo de la fe, que quede fuera de la historia de Cristo.”

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