Es Tiempo de Conectar, julio 02

Dios es El Gran «Yo Soy»

La Biblia nos habla de Moisés como un amigo de Dios y en Deuteronomio 34:10-12 encontramos:

“Nunca más hubo en Israel otro profeta como Moisés, a quien el Señor conocía cara a cara. El Señor lo envió a la tierra de Egipto para realizar todas las señales milagrosas y las maravillas contra el faraón, contra toda su tierra y contra todos sus sirvientes. Moisés realizó con gran poder hechos aterradores a la vista de todo Israel.”

A este gran profeta se le presenta Dios como el gran «Yo Soy» y en Éxodo 3:13-15 dice: » Pero Moisés volvió a protestar: Si voy a los israelitas y les digo: “El Dios de sus antepasados me ha enviado a ustedes,” ellos me preguntarán: “¿Y cuál es el nombre de ese Dios?” Entonces, ¿qué les responderé? Dios le contestó a Moisés: Yo soy el que soy. Dile esto al pueblo de Israel: “Yo soy me ha enviado a ustedes”.

Dios también le dijo a Moisés: —Así dirás al pueblo de Israel: “Yahveh, el Dios de sus antepasados, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob, me ha enviado a ustedes. Este es mi nombre eterno, el nombre que deben recordar por todas las generaciones.”

Cuando somos infieles, Él es fiel y Dios promete su presencia continua.

Muchas veces nos paramos en el día a día y nos preguntamos ¿En el nombre de quién voy a ir? ¿Qué voy a hacer Señor? ¿Quién será aquella persona que me pueda recomendar?

Y en todas esas preguntas Dios te dice «Yo Soy el que Soy.”

Moisés se sentía indigno, quizá no te sientes merecedor de la gracia y del favor de Dios pero Él te ha escogido y Dios nunca se equivoca. Necesitas conocer al Gran Yo Soy. No hay nada que junto con Dios no podamos lograr.

Ex. 3:12 dice: “Y él respondió: Ve, porque yo estaré contigo…”

Cada vez que estamos en la presencia de Dios, Él habla a nuestro corazón y nos dice ¿Habrá algo demasiado difícil para mí? ¿Acaso no me conoces? Soy el Gran Yo Soy y Dios se reveló a Moisés como el gran Yo Soy.

Y es que no es que Dios tenga amor, Él es amor. No es que Dios tenga santidad para darnos, Él es santidad, etc. Cuando Dios nos llama, Él se da a conocer en nuestras vidas de manera especial y única.

Cuando nadie te crea y te rechacen, mantén una actitud humilde como la de Moisés.

Hay una relación directa entre humildad y presencia de Dios y presencia de Dios y humildad.

Moisés llegó a ser amigo de Dios y Moisés fue el hombre que conoció a Dios cara a cara; era tanta la presencia de Dios en la vida de Moisés que dice la Biblia que su rostro resplandecía.

Números 12:3 dice que «Moisés era muy humilde, más humilde que cualquier otro sobre la tierra.»

Dios nunca desprecia a los humildes, a los de corazón contrito y humillado.

No hay expertos sobre el tema de la presencia de Dios y no hay nadie que tenga tanta presencia de Dios que no necesite más.

Moisés siendo Moisés, el profeta, el líder de Israel, aquel hombre que era amigo de Dios, él reconocía que aún necesitaba más de Dios.

Sería bueno darnos cuenta que uno de los enemigos de la presencia de Dios en nuestras vidas es el orgullo y el estar tan ocupados que pensamos que no necesitamos de Dios.

Salmos 51:17 “Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado, al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.”

Moisés prefería estar en el desierto con Dios que ir a la tierra prometida. Sí, porque Moisés entendió que es mucho mejor y mucho más importante tener al prometedor que tener la tierra prometida.

¿Que necesitas salvación para tu casa? «Yo, sí, yo soy el Señor, y no hay otro Salvador» (Isaías 43:11)

Yo Soy es el que siempre tiene la última palabra: «Óyeme, Jacob, y tú, Israel, a quien llamé: Yo mismo, yo el primero, yo también el postrero» (Isaías 48:12)

Puedes ir con esos resultados del médico y decirle a Dios ¿tú qué dices? Si, es correcto, aquí dice muerte, pero el Yo Soy dice que soy vida.

Génesis 35:11 dice: “Entonces Dios dijo: «Yo soy El-Shaddai, “Dios Todopoderoso”. Sé fructífero y multiplícate.”

Éxodo 20:2 dice: “«Yo soy el Señor tu Dios, quien te rescató de la tierra de Egipto, donde eras esclavo.”

Levítico 19:4 dice: “» No pongas tu confianza en ídolos ni te hagas imágenes de dioses hechos de metal. Yo soy el Señor tu Dios.”

Isaías 43:15: “Yo soy el Señor, tu Santo, el Creador y Rey de Israel.”

Isaías 48:17: “Esto dice el Señor, tu Redentor, el Santo de Israel: «Yo soy el Señor tu Dios, que te enseña lo que te conviene y te guía por las sendas que debes seguir.”

Jeremías 3:12 dice: “Por lo tanto, ve y dale este mensaje a Israel. Esto dice el Señor:»“Oh Israel, mi pueblo infiel, regresa otra vez a mí, porque yo soy misericordioso. No estaré enojado contigo para siempre.”

En Juan 6:35 encontramos: “Jesús les respondió: —Yo soy el pan de vida. El que viene a mí nunca volverá a tener hambre; el que cree en mí no tendrá sed jamás.”

Juan 10:9 “Yo soy la puerta; los que entren a través de mí serán salvos. Entrarán y saldrán libremente y encontrarán buenos pastos.”

Y finalmente encontramos en Juan 11:25: “Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí vivirá aún después de haber muerto.”

Así que podemos decir confiadamente que EL GRAN YO SOY está con nosotros y oro que sepas lo que esto significa.

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