Devocional 020 julio

Es Tiempo de Conectar, julio 020

Construye para que Permanezca

«¿Por qué me llamáis, Señor, Señor, y no hacéis lo que yo digo? Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras y las hace… es semejante a un hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca.» Lucas 6:46–48

Construir algo duradero no ocurre por accidente.
Vivimos en una época donde todo parece instantáneo: relaciones rápidas, decisiones emocionales, espiritualidad superficial. Pero Jesús no nos llama a lo inmediato ni a lo emocional, sino a edificar con profundidad, a pensar en lo eterno, a construir algo que soporte las tormentas de la vida.

En este pasaje, Jesús compara a dos constructores: uno sabio y uno necio. El sabio no solo escucha la Palabra de Dios, sino que la obedece. Y no solo obedece superficialmente, sino que cava hondo, va más allá de lo visible, toma tiempo para establecer un fundamento sólido: la Roca, que es Cristo.

El necio también escucha, pero no hace nada con lo que oye. Puede parecer que ambos construyen igual al principio, pero la diferencia se revela cuando llega la tormenta.

Y todos enfrentaremos tormentas: crisis, pérdidas, dudas, tentaciones. Solo lo que ha sido construido sobre Cristo resistirá.

¿Qué significa cavar hondo?
Cavar hondo implica profundidad espiritual.
Leer y meditar en la Palabra cada día
Orar aun cuando no sientas ganas.
Tomar decisiones difíciles con el fin de complacer y obedecer a Dios.
Apartarte del pecado aunque te cueste relaciones o reputación.
Ser constante, aunque nadie te vea.
Hacer una buena mayordomía de tus recursos.

También significa pensar a largo plazo. Jesús dijo en Lucas 14:28: «¿Quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla?»

Seguir a Cristo no es una moda ni una emoción pasajera. Es un compromiso de por vida. Debemos calcular el costo, entender que a veces dolerá, pero valdrá la pena porque estamos construyendo algo eterno.

Hoy en día es fácil dejarse llevar por emociones intensas, momentos de entusiasmo o decisiones impulsivas. Pero Jesús nos llama a algo más profundo: a construir una vida con fundamento. No sobre arena ni sobre sentimientos, sino sobre la obediencia a Su Palabra.

Seguir a Jesús no se trata sólo de momentos de inspiración, sino de decisiones diarias conscientes. De contar el costo, de saber que estamos construyendo algo que debe resistir tormentas, pruebas y el paso del tiempo.

Reflexiona hoy:
Estoy construyendo algo tan sólido que voy a permanecer hasta el fin de mis días?

¿Estoy edificando mi vida sobre emociones pasajeras o sobre la verdad de Dios?
¿He calculado el costo de seguir a Cristo con seriedad, o solo lo sigo cuando es conveniente?

Oración:

Señor, ayúdame a construir mi vida sobre tu Palabra, no sobre emociones. Dame un corazón dispuesto a obedecer, a cavar hondo y a edificar con paciencia algo que permanezca. Quiero ser como aquel que edificó sobre la roca. Amén.

Te animamos a que dones en el siguiente enlace https://conectarglobal.org/donaciones/ . Así nos apoyarás a seguir con este hermoso servicio de llegar a muchas más personas.

Y que hagas uno de nuestros cursos en ⁠www.conectarglobal.org⁠ que son sin costo alguno.

Creado y narrado por Juan Bravo. producido por Conectar Global

Dar clic a la siguiente imagen para entrar a los cursos

Si el mensaje ha hablado a tu vida, deja un comentario a continuación.