✅Alabanza poderosa

Devocional diario septiembre 30

Alabanza poderosa

“Después de esto, los ejércitos de los moabitas y de los amonitas, y algunos meunitas[a] le declararon la guerra a Josafat.

Llegaron mensajeros e informaron a Josafat: «Un enorme ejército de Edom[b] marcha contra ti desde más allá del mar Muerto;[c] ya está en Hazezon-tamar». (Este era otro nombre para En-gadi).” 2 Crónicas 20: 1-2

v. 21-25 “Después de consultar con el pueblo, el rey nombró cantores que caminaran delante del ejército cantando al Señor y alabándolo por su santo esplendor. Esto es lo que cantaban: «¡Den gracias al Señor; su fiel amor perdura para siempre!».

Cuando comenzaron a cantar y a dar alabanzas, el Señor hizo que los ejércitos de Amón, de Moab y del monte Seir comenzaran a luchar entre sí.

Los ejércitos de Moab y de Amón se volvieron contra sus aliados del monte Seir y mataron a todos y a cada uno de ellos. Después de destruir al ejército de Seir, empezaron a atacarse entre sí.

De modo que cuando el ejército de Judá llegó al puesto de observación en el desierto, no vieron más que cadáveres hasta donde alcanzaba la vista. Ni un solo enemigo había escapado con vida.

El rey Josafat y sus hombres salieron a recoger el botín. Encontraron una enorme cantidad de objetos, vestidos y otros artículos valiosos, más de lo que podían cargar. ¡Había tanto botín que les llevó tres días solo para juntarlo!”

La estrategia fue que los que iban adelante en el ejército hacia la batalla, no llevaban espadas, lanzas ni escudos, sino que llevaban arpas, panderos y trompetas. Es decir, enviaron a alabanza por delante.

La moraleja de esto es que cuando te sientas rodeado por problemas y tengas un enemigo más grande y más poderoso que tú, envía tu alabanza por delante. La alabanza llega siempre primero que la victoria.

1) La alabanza abre el camino. V.21
Lo normal es alabar a Dios después de la victoria, pero este principio me enseña que la alabanza me prepara para la victoria.

No podemos esperar la victoria para alabar a Dios, debemos alabar a Dios para ver la victoria.

Mientras tengas alabanza en tus labios vas a tener victoria en tu vida. Y aun en los momentos más difíciles de tu vida, puedes cantar y recordar que Dios es fiel, que Él te ama y tiene un propósito maravilloso con tu vida.

David nos enseña en el Salmo 34:1-2:

“Alabaré al Señor en todo tiempo; a cada momento pronunciaré sus alabanzas. Sólo en el Señor me jactaré; que todos los indefensos cobren ánimo”.

David entendió el poder que hay en la alabanza y que en todo momento es bueno alabar a Dios.

Muchos dicen, cuando tenga ánimo voy alabar a Dios, pero es al revés, alaba a Dios para que tengas ánimo.

2) La alabanza mueve la mano de Dios.

V.22-23 “Cuando comenzaron a cantar y a dar alabanzas, el Señor hizo que los ejércitos de Amón, de Moab y del monte Seir comenzaran a luchar entre sí. Los ejércitos de Moab y de Amón se volvieron contra sus aliados del monte Seir y mataron a todos y a cada uno de ellos. Después de destruir al ejército de Seir, empezaron a atacarse entre sí.”

Cuando alabas a Dios, estás activando el poder de Dios a tu favor. Dios no hizo nada hasta que el pueblo empezó a cantar y alabar, el momento en que el pueblo comenzó a alabar, Dios comenzó a trabajar.

Y la Biblia dice que Dios confundió al ejército enemigo de tal manera que se empezaron a matar entre si.

La alabanza desbarató los planes del enemigo en contra de Israel y la alabanza va a desbaratar los planes del enemigo en tu contra.

Pero no solo eso sino que Dios hizo que los enemigos de Israel cayeran en su propia trampa. La alabanza convierte los planes en tu contra en planes a favor.

Una ciudad como Jericó, con murallas altas, cayó con la alabanza y con el toque de trompetas.

Mientras tu alabas a Dios, murallas, barreras y limitaciones van a caer de tu vida.

La alabanza de Pablo y Silas hicieron temblar la cárcel donde estaban presos, las puertas se abrieron y las cadenas se rompieron y fueron libres.
3) La alabanza te da victoria sobre tus enemigos.

V.24) De modo que cuando el ejército de Judá llegó al puesto de observación en el desierto, no vieron más que cadáveres hasta donde alcanzaba la vista. Ni un solo enemigo había escapado con vida. Cuando alabas tus enemigos huyen, corren y escapan.

La Biblia dice que estaban en el desierto, un lugar árido, sin agua, de climas extremos pero a pesar de eso nada impidió al pueblo de Israel alabar a su Dios.

Salmo 18:3 dice: “Clamé al Señor, quien es digno de alabanza, y me salvó de mis enemigos.”

David reconoce en este Salmo que él clamó y alabó a Dios y el Señor lo salvó de sus enemigos.

Salmo 46:1: “Dios es nuestro refugio y nuestra fuerza, siempre está dispuesto a ayudar en tiempos de dificultad.”

4) La alabanza te conduce a la bendición.

v.25 “El rey Josafat y sus hombres salieron a recoger el botín. Encontraron una enorme cantidad de objetos, vestidos y otros artículos valiosos, más de lo que podían cargar. ¡Había tanto botín que les llevó tres días sólo para juntarlo! Al cuarto día se reunieron en el valle de la Bendición, el cual recibió ese nombre aquel día porque allí el pueblo alabó y agradeció al Señor. Aún se conoce como valle de la Bendición hasta el día de hoy.”

La Biblia dice que Dios no sólo derrotó a los enemigos de Israel sino que les dejó una gran recompensa en joyas, vestidos y artículos valiosos.

La alabanza no solo trae recompensas espirituales sino también materiales. Dios no solo te quiere dar victorias espirituales sino materiales.

La alabanza guío a Israel del desierto al valle de bendición.

5) La alabanza trae gozo.

V.27) “Más tarde, todos los de Judá y Jerusalén, con Josafat a la cabeza, regresaron a Jerusalén llenos de gozo porque el Señor los había librado de sus enemigos.”

La alabanza no sólo condujo a Israel hasta el valle de bendición sino que trajo gozo en todo el pueblo.

Un pueblo que alaba a Dios es un pueblo que a pesar de sus circunstancias mantiene el gozo. Y un pueblo que tiene gozo es un pueblo que tiene fuerzas porque el gozo del Señor es nuestra fortaleza.

Salmo 71:23 RVC “Mis labios se alegrarán cuando te cante, pues me has salvado la vida.”

Mientras tengas alabanza en tus labios vas a tener gozo en tu corazón.

6) La alabanza te da paz.

V.30) “Por lo tanto, el reinado de Josafat disfrutó de tranquilidad, y Dios le dio paz por todas partes.”

Nunca permitas que las circunstancias roben tu alabanza porque no sólo van a robar tu gozo sino también tu paz. Cuando tu alabas a Dios, aun en medio de la tormenta Dios pone paz en tu corazón.

Por ejemplo, cuando Saúl era atormentado por un espíritu inmundo, llamaba a David para que alabara a Dios y eso traía paz a su alma.

La alabanza es el mejor antídoto contra el desánimo, tristeza y preocupación.

A pesar de los problemas que estés viviendo envía tu a alabanza al cielo y Dios va a enviar su paz a tu corazón.

Si el mensaje ha hablado a tu vida, deja un comentario a continuación, esto nos ayudará a seguir creciendo. Y comparte el mensaje con esas personas que Dios a puesto en tu mente mientras encuchas el devocional.